jueves, 26 de febrero de 2009

La loteria

Hoy es jueves, y como muchos españoles he sellado un boleto de la primitiva. Seguro que los que estéis leyendo esto podréis pensar que es uan gilipollez y ¿que tendrá que ver esto con Cuba? Pues tiene mucho que ver, en Cuba hay una lotería todos los años, y todos juegan, es gratis y no promete premios millonarios, solo promete una cosa. Un visado a EEUU. No es broma todos los años EEUU sortea en acuerdo con el gobierno Cubano entre 8.000 y 10.000 visados. Uds no pueden imaginarse la cantidad de gente que hace cola en la parte de atras de la oficina de intereses para apuntarse. Ya ven según muchos nadie se quiere ir, y es cierto ningún cubano se quiere ir de su país, solo que les están obligando, la miseria del régimén les obliga.
Pues bien,a colación de este sorteo les contaré una historia que me contaron allí, son libres de creersela o no, pero a mi me gusta creermela ya que es la victoria de la agudeza, del ingenio y de como alguien sin nada le gana a un gobierno con todo.
Resulta que un buen cubano, como la gran mayoría, fue agraciado en el sorteo, consiguió su visado a USA. Todo era alegría y festejos, una esperanza una ilusión, pero claro siempre la dictadura está para aguar las fiestas y a todos aquellos que se puedan escapar a una vida mejor. Así que nuestro buen hombre ya sabía lo que le esperaba, sabía que desde el día que su nombre llegase a las autoridades para tramitar su salida iba a ser objetivo de la policia y de los CDR, sabía que tarde o temprano vendrían a su casa a hacer el inventario, es decir se personarían en su casa y harían un listado pormenorizado de todo, todo, hasta la última cucharilla y un día antes de su viaje volverían por alli y si faltaba algo, aunque fuese un simple palillo no podría abandonar el país.
Así que ni corto ni perezoso y con sus buenos vecinos, un día antes de que llegasen a hacer el primer inventario, regaló todas sus pertenencias, cierto es que tampoco era mucho.Así que cuando el lada de la policía aparcó delante de su casa y se apresuraban a entrar en ella, allí estaba él, sentado en el medio de su pequeña casa sin nada alrededor, la casa totalmente vacía y él esperando a sus verdugos.
Ahora imaginen ustedes las caras de esos policías cuando iban dispuestos a levantar acta y se encuentran esa foto. Y nuestro protagonista diciéndoles que siempre ha vivido así, que nunca ha tenido nada. Y esos policías en su mayoría jóvenes, muy jóvenes y de las partes más pobres y humildes de Cuba, perplejos al no poder hacer otra cosa que darse la vuelta y regresar más desorientados de lo que ya estaban.
Así que ya ven yo juego a la lotería esperando a que me toque y poder vivir allí y ellos simplemente esperan salir. Eso sí con la esperanza de regresar porque como dice la canción " Yo se que la Havana me está esperando"

1 comentario:

  1. Fran me ha divertido mucho leerte, dame una vuelta en contandocubanos.blogspot.com, por favor, seguiré visitandote

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